viernes, agosto 19, 2011

RELEVO CON EL GRANDE DE LOS GRANDES





Si eres demasiado "grande" para ser enseñado por un "pequeño", entonces eres demasiado pequeño para ser un grande.
Marcos Witt




No hay que buscarle la quinta pata al gato. La fe verdadera es aquella que se va a la playa a disfrutar de un hermoso día soleado, con piña colada en mano, aunque el centro de meteorología anuncie fuertes aguaceros. Sólo porque Dios dijo que no llovería.

Simple, ingenua, al punto y sin rodeos, es la manera en que les puedo definir la fe de esta chica. Probablemente no pueda recitar ningún versículo bíblico al pie de la letra; dudo mucho que haya tomado algún curso de teología; creo que en la actualidad no asiste a ninguna iglesia, pero es súper contagiosa la alegría con la que comparte su experiencia con Dios.

“Dios sabe lo mucho que yo amo a mi hijo, pero cuando no puedo estar a su lado, con toda la confianza del mundo choco mis manos con las de Dios y hago relevo con él, como hacen en la lucha libre cuando pelean en equipo de dos. Yo no estoy para verlo y cuidarlo, pero Dios está ahí. Eso me hace sentir en paz y segura de que todo está bien”.

Antes que me llamen, yo les responderé; todavía estarán hablando cuando ya los habré escuchado. Isaías 65:24

Tu tiempo en el cuadrilátero ha terminado. Necesitas chocar tus manos con las de Dios y hacer relevo de tus problemas y preocupaciones. El quiere aliviar tu carga, traer descanso a tu vida, llenarte de esperanza e inspirar tu alma con canciones de alegría.

A la sombra de tus alas cantaré,porque tú eres mi ayuda. Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:7-8

Cuando hacemos relevo con Dios, le ganamos la lucha al estrés, fortalecemos nuestra fe, traemos paz a nuestro entorno y conquistamos la felicidad. Cuatro por el precio de uno. ¡Buenazo!



Feliz semana,



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