jueves, abril 14, 2011

FUSIÓN DE ALEGRÍA


“La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido”. Rabindranath Tagore

Las hay alegres, chistosas, optimistas, pesimistas, aventureras, tímidas, tiernas, sensibles, despreocupadas, perfeccionistas, descuidadas, habladoras, insensibles, buena gente, egoístas, sinceras, extrovertidas, divertidas, enfocadas, tacañas y derrochadoras.

Unas son apasionadas con los zapatos estrambóticos, las carteras, las tiendas de renombre. Y le fascinan esos cosméticos que le sacan un riñón a cualquiera a la hora de pagarlos. Otras están en el mundo, donde los Crocs son el invento del siglo y los Flip Flops nunca pasan de moda.

Cada una tiene sus propios talentos y virtudes. Entre ellas podemos encontrar a la planificadora de eventos, a la decoradora de interiores, a la cocinera, a la experta en belleza, a la consejera, a la peluquera, a la fashionista, a la doctora, a la tecnológica, a la payasa, a la psicóloga y hasta a una experta en finanzas.

Dicen por ahí, que las amigas son como un brasier, dan soporte y están cercanas al corazón. Otros las comparan a la sangre, cuándo se está herido acuden sin que la llames. Para mí las amigas son como un bouquet de flores, cada una es diferente y hermosa según su especie. Juntas son una fusión armónica de amor, tolerancia alegría y respeto.

Hay amigas con las que sólo compartimos un cafecito, en cambio con otras tenemos la confianza de abrir nuestro corazón de par en par, sin temor al rechazo. Están las que consideramos nuestro relajante muscular, porque sus ocurrencias terminan siendo una sesión gratuita de risoterapia. ¡Que chulería!

Si tienes la dicha de tener afinidad con una persona, a tal punto, que puedes pensar en voz alta, ser tu misma, llorar, reír y expresar libremente tus frustraciones y debilidades, puedes estar segura que has sido bendecida por Dios, no con una amiga, sino con una hermana.

En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia. Proverbios 17:17 (RV)

¡Celebremos las amigas y hermanas que enriquecen nuestro diario andar!

Feliz Semana,

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