Foto: Cutiepie Company - Creative Commons |
Es preferible brillar progresivamente a través de
los huecos de nuestras cicatrices que vivir de apariencias.
¿Sabes lo que es un abollón emocional?
Un abollón emocional no es más que un pescozón sin
manos, causado por palabras o hechos que nos enseñan que la vida no es color de
rosas, sino un rosal donde superar las
espinas nos provee vida y significado.
¡Quien sea libre de abollones que salga de su escondite
y se tome una taza de café espresso para que despierte!
Creo que todos de una manera u otra necesitamos la
adversidad para desarrollar nuestro carácter, afianzar nuestra dependencia en
Dios, descubrir nuestras virtudes, hacer
florecer nuestro potencial y conquistar nuestro propósito.
Las experiencias más difíciles son por lo general
las que pulen nuestras mejores cualidades.
Y ahora con ustedes “Emociones Abolladas”
Hola, me llamo Emociones Abolladas. Por mucho tiempo
fui muy susceptible a la opinión de los
demás, ya que por naturaleza tiendo a exagerar mis carencias y a minimizar mis
virtudes.
Mi estado de ánimo era muy variable, lo cual me impedía relacionarme
conmigo misma y con los demás de manera saludable.
Me ofendía por todo y pasaba largas vacaciones
con mis amigas conmiseración, queja y desánimo.
Pero un día Dios interceptó mi camino y me enseñó que:
1) No
soy marioneta de mis emociones. Tengo autoridad sobre mis pensamientos, sobre
mis emociones y de todo lo ocurre en mi interior.
2) Muchas
veces ganamos y otras veces crecemos. Para transitar en la carretera que lleva
al éxito, generalmente hay que pasar por el bulevar del fracaso.
3) La
tristeza no es un huésped permanente. Simplemente nos hace la visita para
enseñarnos el valor de la perseverancia y la importancia de mantener nuestra
mejor actitud en medio de la prueba.
Los justos podrán tropezar siete veces, pero
volverán a levantarse.
-Proverbios 24:16 (NTV)
4) Mis
fracasos no me definen. Mis fracasos me preparan. El desierto me conecta con mi
tierra prometida.
5) Mis
cicatrices cuentan la historia de lo que Dios ha hecho en mi vida. No están ahí
para avergonzarme o para hacerme sentir inadecuada-al contrario, son epístolas que
narran la grandeza del amor y la Gracia de Dios en medio de mí caos.
Cuando nos damos permiso para fallar, al mismo
tiempo nos estamos dando permiso para superarnos.
– Eloise Ristad
La vida no es color de rosas, sino un rosal donde superar
las espinas, nos hace vivir con propósito y significado.
Ver Video: (http://youtu.be/e-V1NYzCUKE)
Feliz Semana,
Sandy
Sandy@friendshiplatte.com