sábado, abril 22, 2017

TELEGRAMA CELESTIAL



Las verdades que Jesús habla a mi corazón en la privacidad de la oración, es la armadura que me mantiene de pie en tiempos de prueba.


Hola,

 Quiero que comiences este día recordando lo valiosa y amada que eres. Yo sé que muchas veces piensas que no mereces mi amor, pero ya va haciendo hora de que sueltes ese sentimiento y te dejes querer.

Mi amor por ti no está condicionado al tamaño de tu fe, a tu madurez espiritual, ni a tu registro de buena conducta. 
Pagué con mi propia vida el precio de tu libertad cuando te encontrabas en tu peor momento —incapaz de ayudarte a ti misma, en cadenas, hundida en el foso de la culpa y la desesperación —.

Fui declarado culpable para fueras declarada inocente.

Cargué con tu condena para que camines en total libertad.

Sobre mí llevé todas tus enfermedades físicas y emocionales, para que enfrentes cada día con esperanza, deseosa de luchar por los sueños que he sembrado en tu corazón.

En la cruz destroné todos tus miedos para que vivas en la plenitud de mi amor por ti.

El sacrificio de Jesús en la cruz superó en gran manera la deuda de nuestros pecados. 



Lo único que te pido es que creas en mí, que descanses en mí, que recibas lo que te ofrezco por gracia, y no trates de ganarlo por tus propios méritos. Por más que trates jamás podrás comprar mi fidelidad hacia ti con tu justicia propia.

Creer en mi significa que aunque no te sientas perdonada, sabes que lo eres.

Creer en mi significa que valoras la verdad de mi palabra por encima de tus sentimientos.

Creer en mi significa que yo soy la fuente absoluta de tu identidad.

Creer en mi significa que vas a dormir tranquila, aunque en lo natural no le veas salida a tu problema.

Creer en mi es celebrar mi promesa antes de que esta se haga realidad en tu vida.

Deja que mi gracia espante tus miedos.

Deja que mi amor te revele lo valiosa que eres.

Deja que mi presencia le dé significado a todo lo que haces.

Puesto que en mí vives, te mueves y existes.

Atte. -Jesús

Conviene que el corazón sea fortalecido por la gracia. – Hebreos 13:9 (NVI)

 


Amor y Gracia

Sandy