viernes, noviembre 10, 2017

SERENATA DE GRACIA



Hoy es un buen día para ponerle punto final a esa experiencia negativa para soltar tus cargas en las manos de Jesús y perderte en Su abrazo.



Este día es un regalo de Dios, diseñado especialmente para ti con el pincel de Su amor.

Sus misericordias salen a tu encuentro llevando el peso de todas tus preocupaciones y ansiedades, para que tu andar sea más ligero y feliz.

Sus promesas se unen a la celebración anticipando lluvia de esperanza, ríos en tierra árida, camino a través del desierto, belleza en lugar de cenizas, paz en medio de la tormenta.

Su afirmación grita con autoridad y poder: ¡No temas, para Dios no hay nada imposible! Él va delante de ti como poderoso gigante. Su presencia espanta tus temores, Su amor te hace valiente.

La esperanza te recibe con una sonrisa, recordándote que lo mejor está por llegar. Animándote a confiar y a seguir adelante; a soltar y a descansar en Su cuidado.


No te angusties. Confía en Dios, y confía también en mí. – Jesús


Hoy tómate el tiempo de saborear lentamente el néctar de Su gracia—favor gratuito e inmerecido de Dios—. Rinde tu mente y corazón a la melodía de Su dulce voz, y deja que la sinfonía de Su amor sane cada herida, cada recuerdo y cada pensamiento equivocado.

¿Lo escuchas?

Jesús te invita a permanecer en Su amor, a descansar, a soltar, a recibir Su provisión y a disfrutar la vida en abundancia que Él te ofrece.

Enfócate en Jesús, habla con Jesús, desahógate con Jesús, cuéntale a Jesús, explícale a Jesús, llora con Jesús, espera en Jesús, disfruta a Jesús y verás como todo comienza a florecer.

¡Vamos! ¡Avanza! No te quedes estancada en ese dolor, en ese error, en esa herida, en se resentimiento que te roba el gozo de hoy. No te quedes estática frente al problema que te agobia. Mira a la Cruz, mira a Jesús y acepta lo que Él ha hecho por ti.

Él quiere que estés consciente de Su amor, que reposes tu alma —mente, voluntad, emociones — en la seguridad de Su aprobación, no en la vulnerabilidad de tus sentimientos y emociones.

Sueña despierta, llena tu imaginación con el cumplimiento de Sus promesas sobre tu vida, espera lo mejor y pídele un claro entendimiento de Su gracia.

Hoy es un buen día para ponerle punto final a esa experiencia negativa —Para soltar tus cargas en las manos de Jesús y perderte en Su abrazo.

Porque es buena cosa para el corazón el ser fortalecido por la gracia. – Hebreos 13:9

Amor y gracia,

Sandy