“Misericordia, es no recibir las cosas malas que mereces. Gracia, es recibir todas las cosas buenas que no mereces”.
– Joseph Prince
Más allá de la
religión.
Más allá de las
cuatro paredes de la iglesia.
Más allá de
anhelar la aprobación de Dios.
Más allá de
maquillar mis heridas.
Más allá de
decir “Amén”.
¡Existe un
lugar!
Más allá de mis
creencias.
Más allá de la
opinión que tengo de mí misma.
Más allá de la
opinión que los demás puedan tener de mí.
Más allá de mis
expectativas y sueños abortados.
¡Existe un
lugar! ¡Sí, existe un lugar!
Más allá de mis
fracasos.
Más allá de mis
malas decisiones.
Más allá de mi
dolor.
Más allá de mis
miedos.
Más allá de mis
limitaciones y debilidades.
¡Existe un
hermoso lugar!
Donde Dios sale
a mi encuentro.
Donde Dios me
abraza en mi momento más bajo.
Donde Su amor me
recibe con aplausos y celebración.
Donde puedo
comenzar otra vez.
Donde mi fe
florece con la ternura y confianza de un niño.
Donde el miedo
deja de ser un obstáculo que impide mi crecimiento.
Donde puedo ser
fuerte a pesar de mi fragilidad.
Donde puedo
bailar al ritmo de Sus promesas.
¡Ese lugar es
real! ¡Y tú y yo somos las invitadas de honor!
Lo único que
queda de nuestra parte es abrir nuestro corazón y aceptar este derroche de amor
con brazos abiertos.
¡Bienvenida al
jardín de Su gracia!
"De su
plenitud todos hemos recibido gracia sobre gracia". – Juan 1:16 (NVI)
Amor y gracia
Sandy